En muchos sentidos la labor del crítico es fácil. Arriesgamos muy poco pero tenemos poder sobre quienes someten su trabajo y su persona a nuestro juicio. Preferimos la crítica negativa, que es divertida de leer y escribir. Pero la triste verdad que debemos enfrentar los críticos.
Hay ocasiones en que el critico realmente se arriesga al descubrir y salir en defensa de algo nuevo.
El mundo suele tratar mal al nuevo talento, la nueva creación. Lo nuevo necesita amigos.
Comentarios
Publicar un comentario